Cuando una disculpa no basta, la saga de Nina Lin se vuelve aún más complicada.
Nina Lin, una streamer que ya enfrentaba críticas por una controversia anterior, ha emitido ahora una segunda disculpa después de que surgiera un nuevo clip con Disguised Toast. Este último acontecimiento vuelve a ponerla en el centro de la atención y plantea aún más preguntas sobre los límites y la responsabilidad en el mundo del streaming.
La primera controversia de Nina Lin: Cómo empezó todo
Todo comenzó con una transmisión en vivo —ahora infame— en la que participaron la streamer Nina Lin, otra influencer llamada Zoe Spencer y Said, asistente del miembro de FaZe Clan conocido como Silky. Durante el directo, que tuvo lugar originalmente en 2024, se vio a Nina y Zoe comportándose de una manera que hizo sentir visiblemente incómodo a Said. Lo molestaban, lo rodeaban físicamente y él intentó salir de la situación varias veces. Said, que solo estaba allí como asistente de Silky, más tarde describió la experiencia como humillante y no consensuada.
En respuesta a la primera ola de críticas, Nina Lin publicó una disculpa inicial, reconociendo que sus acciones fueron inapropiadas y que lamentaba haber hecho sentir incómodo a Said. El incidente provocó una fuerte reacción en toda la comunidad de streaming. Cuando el clip resurgió y se volvió viral a finales de 2025, Nina Lin volvió a recibir críticas por no respetar los límites personales. Finalmente, Twitch impuso una suspensión temporal a Nina y Zoe, y toda la situación sentó las bases para la polémica que vendría después.
Nina Lin publica una segunda disculpa tras el clip con Disguised Toast
En un nuevo desarrollo, apareció otro video en el que se ve a Nina Lin en un evento público junto al streamer Disguised Toast. En el clip, Nina se le acerca para darle un masaje sin que él lo pidiera e incluso le toca el trasero en un momento. Más tarde, Toast expresó que se sintió incómodo y que la interacción sobrepasó un límite para él. Esto provocó una nueva ola de críticas hacia Nina, con muchos acusándola nuevamente de no respetar los límites personales.
Ante este nuevo revuelo, Nina Lin publicó otra disculpa, reconociendo que había ido demasiado lejos. Declaró:
“Dejé que mi enfoque en crear contenido me cegara y fui demasiado lejos intentando conseguir un clip. Fue a costa de la comodidad de otra persona y lo lamento profundamente.”
Esta segunda disculpa busca abordar no solo el incidente con Disguised Toast, sino también demostrar que se está tomando las críticas en serio y aprendiendo de sus errores.
Por qué los límites importan en el streaming
Al final, la saga de Nina Lin es más que otra controversia en el mundo del streaming. Es un recordatorio de que la constante presión por generar momentos virales puede llevar a sobrepasar límites reales. Y, más importante aún, muestra que los temas de consentimiento y respeto son fundamentales, sin importar quién esté involucrado. Tomar en serio estas situaciones —ya sea que un hombre o una mujer cruce la línea— es un paso hacia una cultura de streaming más respetuosa y considerada.
¿Qué opinas tú? ¡Déjanos tu comentario!
El artículo original fue escrito por Luis Scharringhausen.