Twitch ha prometido donar 100 mil dólares a una organización benéfica, pero el compromiso genera más preguntas sobre la responsabilidad que respuestas.
Tras el incidente en TwitchCon en el que la streamer Emiru fue agredida, Twitch ha prometido donar 100.000 dólares a una organización benéfica. Pero ¿es esta promesa un acto de responsabilidad o simplemente un intento de evitar problemas legales?
Emiru responde a la promesa de 100.000 dólares de Twitch tras el incidente
En una transmisión reciente, Emiru habló sobre las consecuencias de sus interacciones con Twitch después del incidente en TwitchCon. La popular streamer fue agredida por un individuo que intentó besarla, un hecho que provocó una fuerte indignación dentro de la comunidad de Twitch.
Emiru explicó que presentó a Twitch una “lista de cosas” que quería que la plataforma abordara y, según ella, Twitch aceptó todas. Entre estas solicitudes, la compañía prometió donar 100.000 dólares a una organización benéfica no especificada centrada en la prevención de la violencia.
Aunque esta donación es sin duda un paso positivo para apoyar una buena causa, también parece una forma de control de daños por parte de Twitch, especialmente teniendo en cuenta lo mal que la empresa manejó la situación desde el principio.
La respuesta de Twitch genera preguntas sobre la responsabilidad
El manejo de la situación por parte de Twitch fue cuestionable, por decir lo mínimo. El comentario de Dan Clancy diciendo que los streamers pueden moderar fácilmente su chat pero no pueden hacer lo mismo en la vida real dejó a la mayoría confundida. ¿Qué se supone que debía hacer ella, darle un time-out para que piense en lo que acaba de hacer? La seguridad en TwitchCon es responsabilidad exclusiva de Twitch, de nadie más.
Aparentemente, a Twitch le gustó la idea del time-out, porque al agresor se le impuso una devastadora suspensión de 30 días en la plataforma —por agresión. Más tarde, esto se modificó a una suspensión indefinida.
Como si eso no fuera suficiente, se informó que Dan Clancy estaba celebrando en un evento para influencers la misma noche en que ocurrió el incidente. Eso, comprensiblemente, generó preguntas sobre responsabilidad. ¿Cómo puede el CEO de una empresa estar de fiesta mientras su comunidad está indignada por una agresión grave que ocur
El artículo original fue escrito por Luis Scharringhausen.