Según el informe financiero, la empresa que alguna vez redefinió el concepto de “coleccionar” podría estar llegando a su fin.
El fabricante de juguetes estadounidense Funko, conocido por sus icónicas figuras Funko Pop!, enfrenta una de las crisis más difíciles de su historia. En un reciente informe financiero, la compañía advirtió que existe una “duda sustancial” sobre su capacidad para continuar operando durante el próximo año, a menos que las condiciones mejoren significativamente.
Caída en las ventas y aumento de la deuda
En el tercer trimestre de 2025, Funko reportó una fuerte caída del 14% en sus ventas netas, que descendieron a unos 250,9 millones de dólares. Al mismo tiempo, la empresa carga con aproximadamente 250 millones de dólares en deudas y ha tenido que modificar sus acuerdos de préstamo en varias ocasiones para mantenerse en cumplimiento con los acreedores.
Varios factores han contribuido a esta caída: una menor demanda de los consumidores, niveles de inventario más bajos por parte de los minoristas y mayores costos derivados de los aranceles y la logística. Además, el mercado de artículos coleccionables —una parte central del negocio de Funko— se ha debilitado a medida que los consumidores reducen sus compras no esenciales.
Sin colapso inmediato, pero con señales de alarma
Aunque la declaración de Funko no significa necesariamente que la bancarrota sea inminente, sí representa una seria señal de advertencia para los inversores, socios y coleccionistas. Sin nuevas fuentes de financiación o cambios estratégicos importantes, la empresa podría enfrentar una grave crisis financiera en el próximo año.
Perspectivas: Entre el estatus de culto y la crisis
Funko alcanzó fama mundial gracias a sus figuras Pop!, que representan a personajes queridos de películas, series y videojuegos en un estilo característico. A pesar de su continua popularidad entre los fans, la compañía lucha ahora contra los efectos de un mercado de coleccionables saturado y los vientos en contra de la economía global.
Si Funko logra revertir la situación dependerá de su capacidad para obtener nuevo capital, ajustar su estrategia de productos y reavivar el interés de los consumidores. Por ahora, las figuras que alguna vez simbolizaron el fanatismo por la cultura pop se han convertido en un reflejo del frágil estado de la propia economía de la cultura pop.
El artículo original fue escrito por Daniel Fersch.