Jesús, toma el volante.

Ya sabes lo que dicen: dos cabezas piensan mejor que una — a menos que una de esas cabezas sea tu abuela legalmente ciega, y la otra esté gritando direcciones desde el asiento trasero – bienvenido a Backseat Drivers.
Un juego de conducción para quienes no deberían conducir (ni sus amigos)
Aquí va la premisa: tú y un amigo (o bueno, tu abuela) se suben a un coche que apenas se mantiene unido con cinta adhesiva, rencor, y tal vez un poco de chicle viejo. Uno de ustedes controla al conductor — tu dulce y valiente abuela — que lamentablemente no puede ver absolutamente nada por encima del tablero. El otro jugador interpreta a su nieto cada vez más traumatizado, que tiene una vista completa del camino... desde el asiento trasero... con cero control sobre el vehículo. ¿Qué podría salir mal?
Tu tarea, como pasajero en el asiento trasero, es guiar a la abuela con instrucciones claras, calmadas y precisas. Lo que realmente harás será gritar “¡IZQUIERDA!” una y otra vez mientras ella, con toda confianza, se lanza a un lago. O a una montaña. O a un puesto de control militar. ¿Quién puede saberlo?
Tu travesía mortal por el país incluye todos los desvíos clásicos: picos congelados, túneles del metro que se derrumban, autopistas con la integridad estructural de un palito de pan y — por supuesto — al menos un laboratorio secreto del gobierno que definitivamente no autorizó que tú lo atravesaras en coche. ¿Mencioné que el coche se está desarmando y necesita reparaciones durante el trayecto?
Y a través de todo esto, Backseat Drivers mantiene un fuerte núcleo emocional: concretamente, el trauma psicológico compartido de dos personas que ahora se entienden demasiado bien — y se detestan lo justo como para que cada curva sea una aventura. Así que, ya sea que quieras fortalecer tus amistades, destruirlas por completo o simplemente gritarle a alguien que amas mientras vuelas hacia atrás por un acantilado en un sedán en llamas, Backseat Drivers te llevará hasta allí. Eventualmente.
Llega en el tercer trimestre de 2025 a Steam, ¡pero ya puedes probar la demo gratuita!
El artículo original fue escrito por Johanna Goebel.