El sorprendente sucesor espiritual de Fire Emblem

La primera vez que un creador dejó la compañía para repetir su éxito por cuenta propia —y el resultado no pudo ser más caótico.

Tear Ring Saga Boxart
Carátula de TearRing Saga | © Tirnanog

De ser una franquicia de videojuegos que Nintendo tenía previsto retirar a principios de la década de 2010 a convertirse ahora en un gigante de millones de unidades vendidas, la serie de rol táctico Fire Emblem ha tenido una historia tumultuosa.

Nada de esto hubiera sido posible sin su creador Shouzou Kaga, quien, tras haber sido responsable de los seis primeros juegos de Fire Emblem, quiso continuar sus éxitos con su propia compañía e propiedad intelectual, allanando el camino para uno de los ciclos de desarrollo más estresantes de cualquier sucesor espiritual.


Decisiones inspiradas

La serie comenzó con Fire Emblem: Shadow Dragon and the Blade of Light (1990), co-desarrollado por Intelligent Systems y Nintendo R&D1, con Shouzou Kaga acreditado por concepto, diseño y escenario. La ambición declarada de Kaga era fusionar el núcleo emocional de los RPG con las tácticas vistas en los juegos de estrategia para hacer que cada unidad en el campo de batalla se sintiera como un personaje real.

La jugabilidad principal de Fire Emblem se centra en mover unidades en un sistema por turnos y basado en cuadrículas, iniciando combates al encontrarse con una unidad enemiga (similar a la serie Nintendo Wars). Dichos combates usan mecánicas ligeras de RPG, con puntos de experiencia y armas que se mantienen entre mapas. También es notable la muerte permanente de las unidades derrotadas (más tarde opcional en remakes y nuevas entregas), así como las inspiraciones anime de la serie en cuanto a personajes e historia.

Las secuelas de Kaga ampliaron su visión de manera distinta: Gaiden (1992) introdujo un mundo superior navegable, mientras que Mystery of the Emblem (1994) profundiza en la historia de Marth. La historia de Genealogy of the Holy War (1996) abarca múltiples generaciones, BS Fire Emblem (1997) fue una precuela del primer juego y Thracia 776 (1999) introdujo mecánicas como la fatiga y limitaciones relacionadas.

Problemas legales

Tras terminar Fire Emblem: Thracia 776 en 1999, Shouzou Kaga dejó Intelligent Systems y fundó su propio estudio, Tirnanog, con la intención de producir un sucesor espiritual de Fire Emblem bajo el nombre provisional Emblem Saga. Nunca se dio una razón oficial para la partida, aunque los fans han especulado que diferencias creativas pudieron contribuir a la decisión.

Dado que Emblem Saga se parecía mucho a Fire Emblem en jugabilidad, nombre y estilo artístico (y iba a lanzarse exclusivamente en PlayStation), Nintendo inició acciones legales alegando violaciones de copyright y competencia desleal, obligando a Kaga y su editorial Enterbrain a cambiar el título a Tear Ring Saga y eliminar referencias evidentes a Fire Emblem poco antes del lanzamiento.

A pesar de la demanda, Tear Ring Saga se lanzó en Japón en mayo de 2001 bajo su nuevo título y con la presión legal aún vigente. Debido a estos problemas, el juego nunca recibió un lanzamiento en inglés y posteriores sentencias obligaron a Enterbrain a pagar daños. Sin embargo, Nintendo no pudo cumplir con su objetivo original de prohibir la venta del título.

Visiones familiares

Fire Emblem Tear Ring Saga Screenshots
Capturas de pantalla contrastantes de Fire Emblem: Thracia 776 a la izquierda y TearRing Saga a la derecha | © Nintendo, Tirnanog

TearRing Saga conservó muchas de las características del trabajo previo de Kaga: dentro de una estructura de rol táctico basada en cuadrículas, los jugadores controlaban un elenco de personajes distintos en batallas a gran escala, debiendo gestionar la colocación, variedad de armas y muerte permanente de personajes. Sin embargo, el título difiere al ofrecer más libertad de movimiento entre batallas, con algunos escenarios principales siendo completamente opcionales.

Al igual que Fire Emblem Gaiden, la historia sigue a dos protagonistas, Runan y Holmes, cada uno príncipe de uno de los reinos caídos del continente Riberia, que está bajo ataque por los ejércitos monstruosos del Imperio Zoa. Durante sus misiones, se encuentran con personajes con arquetipos familiares y usan objetos y armas similares a los señores de Fire Emblem.

Los diseños de personajes e ilustraciones fueron realizados por Mayumi Hirota, quien había trabajado previamente en Thracia 776. Antes de la demanda, el título incluso iba a incluir personajes de Fire Emblem como Lewyn de Genealogy of the Holy War. Algunas innovaciones de TearRing Saga, como el hechizo "Moonlight", llegarían más tarde a su serie modelo, como en Fire Emblem Fates (2015).

Un divorcio exitoso

TearRing Saga fue un éxito comercial en Japón, vendiendo más de 345,000 copias en su primer año a pesar de la demanda en curso con Nintendo. Los críticos elogiaron su profunda jugabilidad táctica y narrativa sólida, considerándolo un verdadero sucesor de Fire Emblem, aunque el título resultó algo polarizador en su momento, dividiendo a la comunidad en seguidores y detractores de Kaga.

Su secuela, Berwick Saga (2005) introdujo múltiples cambios para diferenciarse aún más de la serie original, con el trabajo de Kaga sin acreditación. Su nombre también sería eliminado de los relanzamientos de sus títulos de Fire Emblem y pronto se retiraría del desarrollo comercial de videojuegos, aunque ha apoyado algunas pequeñas revivals de fans con su Vestaria Saga de juegos indie desde 2016.

La serie Fire Emblem continuaría con The Binding Blade (2002), recibiendo su primer lanzamiento fuera de Japón con The Blazing Blade (2003), eventualmente consolidándose en una serie de éxitos comerciales consistentes tras Fire Emblem Awakening (2012). La separación de Kaga y Nintendo ciertamente no fue feliz, pero ahora ambos parecen satisfechos con seguir caminos separados.

El artículo original fue escrito por Adrian Gerlach.

Ignacio Weil

Creador de contenido para EarlyGame ES y conocedor de juegos independientes y de terror. Desde Dreamcast hasta PC, Ignacio siempre ha tenido pasión por los juegos indie y experiencias enfocadas en la historia....